La peculiar carrera al destape de trineos celebrada por segundo año consecutivo en Alemania reunió a más de 14.000 espectadores para presenciar en directo la prueba.
El corredor más rápido fue Christian Schmidt, de 26 años, pero el ganador emocional fue un hombre de 70 años que se llevó la gran ovación de la jornada.
La segunda carrera descuna de trineos no estuvo exenta de polémica, pero las protestas quedaron silenciadas con la presencia de participantes de numerosas nacionalidades y con la auténtica muchedumbre que siguió en directo la prueba.
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